Producido con pimientos cultivados y secados en Paraje El Arbolar a 2300 mts más cerca del sol, y molidos en Santa María.
La región del Valle Calchaquí es la zona agroecológica por excelencia para la producción de pimiento para pimentón. El Valle Calchaquí se extienden a lo largo de +300 kilómetros atravesando las provincias de Salta, Catamarca y Tucumán.
En Tucumán la producción de pimiento para pimentón se sitúa en Tafí del Valle , Amaicha del Valle y Colalao del Valle. La zona posee la aridez y la luz ideal para el cultivo de este tipo de pimientos y que gracias a ello estos poseen una tonalidad roja uniforme que denota su alta calidad.
Existen dos tipos de pimientos difundidos en las zonas de cultivo: los redondos o “bolita salteño” y los largos o “trompa de elefante”. El más utilizado es el largo, ya que de esta variedad no sólo hay disponibilidad de semillas adaptadas al país, sino que también presenta mayor rendimiento por planta.
En los últimos años, la prohibición de colorantes sintéticos y el aumento de costos afectó a los países tradicionalmente productores, por ejemplo España, y esto generó una oportunidad que está siendo aprovechada por Argentina.
Los frutos se cosechan entre febrero y abril, en dos o tres recolecciones a medida que alcanzan una coloración rojo intenso, indicador de la madurez de cosecha.
La cosecha se realiza de manera manual, por lo que el espectáculo de recolección y remoción de los pimientos pasa a ser un atractivo turístico en sí mismo. Los pequeños productores se sirven de rastrillos o palas y diseminan a lo largo de sus campos la roja cosecha.
Aunque la mayor parte de la producción sirve para abastecer de pimentón dulce al mercado interno, el sobrante se exporta ahora al mundo, que colorea de este rojo rubí los más destacados platos de la cocina gourmet.